martes, 15 de noviembre de 2011

=)

Dicen que por la noche es cuando más clara tenemos la mente. Ahora son las 4:44 y me despertaré a las 7, se supone que no tengo derecho a estar pensando, sin embargo, creo que sigo en pie porque no dejo de hacerlo. Me encantan las noches que inspiran a las estrellas a contarme historias, no obstante, no creo que tengan que ver con la gramática española y es a lo que tengo que sobrevivir mañana. Pero estoy tramando un cocktail de cafeína y taurina que me mantendrá en pie el resto del día (o a eso aspiro metida entre las mantas de mi cama).
La mayoría de las veces escribo como terapia a los problemas, esclarece lo que soy incapaz de entender. Vomito ese bolo alimenticio de palabras que se revuelven en mi cabeza y después, esa sensación de malestar desaparece. Pero esta noche es diferente, hoy siento esa paz de cuando entiendes que es lo que tienes que hacer, de cuando la vela descansa tras la tormenta. Esa paz que irónicamente me trae nuevas incertidumbres pero que me mantienen caminando para descubrirlas. Probablemente lo que no me permita dormir sea una nueva ilusión, nervios, intriga, ganas de lanzarme al vacío. Es como si fuera 6 de enero y supiera que cuando abra la puerta encontraré miles de regalos. No sé si mañana será día 6, pero lo bonito es que cualquier día puede ser día de Reyes.

1 comentario:

  1. Los regalos son sorpresas, y cada día nos aguardan miles de sorpresas. Como dice el dicho: "Nunca te acostarás sin saber una cosa mas."

    Hiván Ramone

    ResponderEliminar